martes, 30 de septiembre de 2014

MI GATO BLANCO NO SE CURA - Mordedura en gato

Estoy desesperada, ya no sé qué hacer con Blanco. Ya sabéis que desde el 24 de julio lo he tenido dentro de casa, por una herida que le hicieron en el cuello en época de celo de las gatas. (afortunadamente ahora está castrado).

Todo este tiempo ha estado llevando el collar isabelino y, tengo que deciros que el pobre se ha portado muy bien y no ha causado ningún problema. Otro gato hubiese estado muy inquieto, pero Blanco se ha comportado muy bien. Lo malo ha sido que cada vez que he visto que estaba mejor, o bien se lo he aflojado, o le he quitado la protección de tela, y en unos segundos, todo lo que habíamos adelantado se ha perdido, y vuelta a empezar.

La última vez me dije que hasta que no estuviese todo perfecto, y le hubiese crecido el pelo no le quitaría nada. Y así lo hice.


Mirar qué contento y feliz que se le veía, y más contenta estaba yo al ver que no se rascaba. La verdad es que no tenía motivos, pues ya todo su cuerpo estaba perfecto y curado. Así que lo dejé y me metí dentro de casa.


No había pasado ni media hora cuando salí y me quedé anonadada cuando le vi la oreja toda ensangrentada. Y más cuando descubrí que había hecho lo mismo con la herida del cuello.

Y ver que en gran parte de su cuerpo tenía la carne toda irritada 


Corriendo le volví a tapar con la manga de una de mis camisetas, le puse esparadrapo y así lo he dejado. Ya he desistido, no le vuelvo a poner el collar isabelino, y espero que con los cuidados de Botitas mejore. Pero la verdad es que estoy preocupada ya que han pasado ya tres días y la herida del cuello no mejora y no deja de rascarse. 


Ponerle en collar isabelino y volverlo a meter dentro de casa no lo hago, pues no ha servido de nada, y además mi marido ya me ha dicho que desista. Además tenemos el sonido de estar lamiendo el collar metido en la cabeza.










  

domingo, 28 de septiembre de 2014

TRES PERROS AÑASTRENSES - CONDADO DE TREVIÑO

Mira que los perros son curiosos, nada más que ven a alguien merodeando por su casa enseguida salen a fisgonear 

Otro curioso

El perro y su sombra 



miércoles, 24 de septiembre de 2014

GORRIÓN - Logroño


Un día recorriendo el casco antiguo de Logroño, y mirando hacia arriba buscando escudos para fotografiar, me fijé en este gorrión, posado en unas plantas que salían entre los sillares de una vieja vivienda.

Inmediatamente se puso en la posición de lanzarse en picado 



Y para sorpresa mía, lo hizo hacia una tela de araña que estaba repleta de mosquitas, y vi cómo se ponía las botas

Bien alimentadito bajo a tierra dio un pequeño paseo y se marchó

viernes, 19 de septiembre de 2014

FLOR DE HOSTA

Hosta

Flor de Hosta

Hoy os voy a hablar de la Hosta, una planta vivaz de grandes hojas verdes, que pertenece a la familia de las liliáceas. Su flor no es muy bonita, pero sin embargo lo que si que llama mucho la atención son sus variegadas y lanceoladas hojas.

Hojas de Hosta


Esta planta que he visto por muchos de los pueblos de La Rioja, necesita sustrato a base de turba y arena. Se reproduce por bulbos.

viernes, 12 de septiembre de 2014

PINSCHER MINIATURA - Treviño, Burgos


Hoy os voy a mostrar a estos perritos que creo son de la raza Pinscher, digo "creo" ya que no soy muy experta en el tema de las razas y, me gustaría, que si estoy equivocada y no lo son, pues que alguien me lo diga y lo corrijo.


Esta raza de perros que también se le conoce como el pequeño doberman, viene de Alemania es muy familiar, y se crio para controlar a los roedores en los establos. (Igual es que no tenían gatos por allí).





Son muy juguetones aptos como perro de compañía, y se dice que hay que tener mucho cuidado en su educación, ya que si no se pueden hacer los amos de la casa.
Sabéis donde los vi, pues en Treviño, capital del condado que lleva su nombre, en la provincia de Burgos, si queréis conocer el pueblo pinchar aquí.

jueves, 4 de septiembre de 2014

PERRO ESPERANDO A SU DUEÑA - Cintruénigo

En el pueblo de Citruénigo

Es muy normal ver a nuestras mascotas atadas, o bien a un desagüe como en la foto, o en los árboles o farolas, esperando a sus dueños mientras hacen la compra.

Yo también solía hacerlo cuando vivía en Barcelona, aunque tengo que reconocer que si no lo podía ver me daba mucho miedo, y procuraba estar el menos tiempo posible sin verle, y hacía la compra lo más rápido posible.

Aunque recuerdo una vez, en la que me despisté tanto, que salí del super y me fui a mi casa, dejándome a Mendy, un Husky Siberiano atado en la farola. No recuerdo cuanto tiempo pasó, pero si recuerdo el susto que me llevé cuando me di cuenta de que me lo había olvidado. Salí escopeteada, con un miedo terrible, ya que no sabía si lo encontraría, pero afortunadamente allí estaba quietecito y atado a la farola.